lunes, 14 de abril de 2008

15/04: Empezando el guión

Saludos a todos desde Offenburg:

A los que seguís leyendo este blog, gracias de antemano. Se que muchas de las entradas son muy aburridas y que no se suele actualizar recientemente. 

Bueno, el caso es que hoy he empezado con la sinopsis y el guión de la película que tengo que presentar como proyecto final para algunas de las asignaturas. Si señor, habéis leído bien. Con este corto, vamos, el proyecto en sí, me voy a ventilar tres asignaturas y parte de otra. 

Si bien en principio puede ser sencillo, el trabajo que hay detrás de cualquier producción es pesado. Ahora más que nunca me doy cuenta de lo complicado que es hacer cualquier película (incluidas las de Uwe Boll)

Y no os aventuréis a pronosticar ningún tipo de gore o troma de baja estofa. Mi idea es realizar un documental. Cuando lo tenga terminado pienso colgarlo en youtube. Cuando tenga algo realizaré un teaser. Espero que lo critiquéis intensamente. 

Un saludo:

Fran

miércoles, 9 de abril de 2008

03/04: Estudios de producción

Saludos de nuevo a todos desde Alemania.

Sirva esta entrada para demostrar que hago algo más que automasajearme el escroto. Esta semana (aunque la entrada se publica con retraso) hemos empezado las clases en Ohlsbach, un pueblecito en el que están situados los estudios de producción de la Hochschule. 

El caso es que para todo aquel que está acostumbrado a hacer sólo prácticas de la muerte a pica tecla estas prácticas son todo un lujo. Te pasas toda la mañana con la cámara de arriba para abajo haciendo cada una de los tipos de tomas y por la tarde llega la hora de montarlas, seleccionando las que te parecen mejor y componiendo un pequeño corto que se entrega como ejercicio evaluable (o eso creo)

Me está empezando a gustar el sistema alemán, las cosas son más concretas, imaginad unas prácticas en las que el número de horas se respeta de forma escrupulosa y te da tiempo a hacerlo todo.

miércoles, 2 de abril de 2008

31/03: Conduciendo hacia Frankfurt

La casualidad quiso que esta semana un amigo necesitase de mis hábiles capacidades en el campo de la conducción de vehículos automóviles para un viaje hasta Frankfurt (o Francfort para los más delicados) y luego hasta Stuttgart. 

El viaje es en sí el motivo de esta entrada, puesto que en Frankfurt no había tiempo de turistear (en otra ocasión tal vez), ya que he batido mi propia marca de velocidad, la cual, por motivos vitales, no pienso superar. 

El caso es que más vale que olvidéis todos aquellos prejuicios que podáis tener sobre las carreteras alemanas y sus pobladores, ya que cuando a un teutón le das un volante y cuatro ruedas afloran en él sus instintos más bárbaros y salvajes. 

En esas autovías de tres carriles, el de la derecha es para camiones, el del centro para aquellos que viajen a 140-150 y el de la izquierda para los que desprecien su vida. Os aseguro que casi viajo al futuro en ese carril.

Un saludo:

Fran